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Dentro de los debates más usuales sobre el café están su procedencia, su variedad y su tostado, de aquí destacamos los grupos de Natural y Torrefacto.

Dentro del café Natural sobresalen por su consumo dos tipos; el café arábica, que es una de las especies más antigua, relativamente fragil y sensible a las enfermedades, muy apreciado por sus cualidades aromáticas y por su fino sabor delicado e intenso, representando los ¾ de la producción mundial, y el café robusta, descubierto a finales del siglo XIX, que crece más rapido que la arábica, es una planta con más vigor y más resistente a las enfermedades, contando con un rendimiento más elevado, su sabor es más fuerte y se suele emplear para mezclar con otros cafés.
Estas variedades las podeis encontrar en formato cápsula, en nuestro café Arabo Arábica 100%, café Fuerte (100% robusta) y café Intenso (50% arábica y 50% robusta).

Por otro lado nos encontramos con el café Torrefacto, que se obtiene mediante el tueste de granos de café (normalmente de baja calidad, incluso se llegan a utilizar para abaratar costes legumbres viejas ) mezclado con azúcar, con lo que obtenemos un color más oscuro y un sabor más fuerte y ácido en la bebida. Dicho sistema se considera dañino para la salud, de echo está prohibido en la mayoría de paises europeos (sus mayores fabricantes y consumidores son España y Portugal).

A nivel nacional, dependiendo de la zona geográfica, podemos encontrar que se sirve el café 100% natural (cada día más), y mezclas en proporciones que van del 90/10 y 80/20, hasta casos extremos en los que se usa un 100% torrefacto (pobres estómagos…)

Nuestra recomendación, es utilizar siempre café 100% natural (como el suministrado por Espresso Balear), para evitar problemas estomacales como úlcera, gastritis, acidez… y poder disfrutar de un exquisito producto para el deleite de nuestro paladar.